miércoles, octubre 19, 2005

Nos lavan el cerebro

No voy a universidad. Esto es un campo de concentración para lavarnos el cerebro. Estoy seguro. Todos los martes tenemos una clase horrible, no puedo más con esa clase. Nos pasamos cuatro horas con una mujer, fea, pero fea fea, de las incómodas de ver, de las de no me toques que me da grima. Este engendro corso, porque tiene denominación de origen, se dedica a hablarnos de la política corsa, la fiesta corsa, el opel corsa, el vectra y la lengua corsa. A mi me parece estupendo si no fuera porque la asignatura se llama Taller de escritura y su orientación debería ser otra. Para colmo me tengo que leer un infumable libro llamado 'Bréviairie méditerranéen' (sobre la cultura mediterránea, la corse y su papel en la historia del mundo mundial. Claro está que lo que hacen unos 200 mil habitantes que tiene la isla influye en el mundo entero y ha marcada un antes y un después en el desarrollo del mundo. El otro libro que nos tenemos que leer para el examen no le consigo recordar pero va por el mismo camino.

Pero de lo que yo me quejó no es de los libros de la sofea, sino del documental que nos puso el otro día en clase. No he visto un esperpento de documental peor que ese. Se podía ver como dos borrachos fumando en una mesa discutían. Si no estaban borrachos ellos, desde luego que el cámara si que lo estaba, pues lo movimientos del mismo no eran normales. Cada cierto tiempo de la discusión se veían imágenes extrañas a modos de volcanes en erupción con sonidos de gritos o lamentos o yo que se. Toda clase guardaba silencio en este momento excepto los guiris, nosotros, que no podíamos dejar de reir mientras apartábamos la vista de la mini pantalla de televisión de la clase para que no nos lavaran el cerebro. Tengo que hacerme con una copia del documental para llevarlo a clase de Realización en España y pedir ayuda a un profesor para descifrar el motivo del mismo. De lo que trataba el documental no puedo decirlo, pues no podía dejar de mirar el apartado técnico mientras gruñía y los otros me pedían que me tranquilizase.

'Une imaginaire pour une mondialité a faire' de Federika Berteli, es el nombre de este documental. Por favor es un material peligroso, si alguien encuentra algún día una copia deberá destruirla inmediatamente, pues de verla los daños cerebrales serán irreparables.

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