lunes, enero 09, 2006

Ya llegan los reyes...

Ya llegan los reyes dicen, pero ¿por dónde? Vamos a ver, a donde llegan. Me imaginé que el retraso podría deberse a algún tipo de problema lingüistico, no se, no les habrán dejado pasar la frontera. Podría ser que los corsos con eso de la identidad propia no quieren ser tampoco europeos y les han hecho pasar por la aduana, lo cual unido a la velocidad de la burocracia de aquí no me extraña en absoluto.
Pero claro después de haber pasado 4 días me están empezando a cansar. Con lo fiel que yo les he sido todos estos años. Después de haber realizado esos boicots a los productos del hombre gordo, con bigote y acento del norte tantos años (y no es Carod Rovira de quien hablo). Porque lo vengo diciendo desde hace días que mi madre cuando se cabrea es lo que pasa. Nada de Juana de Arco o Clara Campoamor. Y es que el boicot catalán tiene su origen en Móstoles. Pero dejando al lado temas tan triviales, ¿alguien ha visto a los reyes?
Mira, que me tienen preocupado. Lo he intentado todo, todo. He dejado la ventana abierta por las noches, con un frío de cojones he dormido, a la vez que dejaba mi roscón de reyes encima de la mesa (que por culpa de su viaje hasta tierras galas en mi maleta, su grosor no pasaba de los 4 mm) y agua en el cubo la fregona pa' los camellos. Les he hecho café. Y es que hasta ¡¡he sacado hasta la basura!!. Pero que más quieren que haga. Lo he probado todo, por el rito zulú, invocando a Cucufato, pedí la ayuda de Johari, me fui a la cama temprano... les he puesto hasta productos Hacendado que Marta trajo de ese nuestro reino para que se sintieran como en casa. Nada funciona. Creo que el acento gabacho de mis palabras les asusta. Mientras la gente de aquí pasea por las calles con total tranquilidad ajenos a todo lo que sucede. No saben lo que se pierden al no tener esta fiesta.

Pero bueno, también tengo que decir para todos aquellos que estén pensando 'te jodes, eso te pasa por irte de Erasmus' decirles que los Reyes ya me hicieron su visita anual cuando estuve en la Hispania. Lo que pasa es que me hubiera gustado enseñarles la cochambre en persona, que aunque pequeña, tiene todo un mundo encerrado en su interior al que poca gente podrá nunca tener acceso. Y es que sus 13 m2 son testigos de unos momentos irrepetibles.
Y ahora los que os jodeis sois vosotros por no pedir el Erasmus.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Querido Javier:
¡Claro que pasamos por Córcega! No sin antes pedir permiso a nuestro colega para no entrometernos en su territorio. Nos hubiera dado igual que nos lo diera o no, porque de todas formas habríamos ido. Pero ya sabes... la diplomática política. Bueno, bueno, bueno, querido niño Javier ¿Que tal te has portado este año? Bien ¿verdad?, por eso te hemos dejado tus regalos días antes, haciendo una excepción. Pero ¡ojo! no se volverá a repetir, porque nosotros sólo trabajamos un día al año y así lo dicen los estatutos del sindicato de reyes magos, bueno de reyes en general: unos repartimos regalos y otros dicen el discurso de Navidad, pero lo dicho: una vez al año.
Pero pedazo de ignorante ¿por que dejas la ventana abierta? ¡Si somos magos! ¡que atravesamos los muros chaval! Estuvimos dentro de la tuya cochambre y no nos tomamos el café porque tenemos la tensión alta, ya sabes, la edad, y los camellos no bebieron el agua de la fregona porque no era de Solán de Cabras y el roscón que tenías, aunque aplastado era nuestro roscón, como nos emocionó verlo. Y te dejamos muchas cosas: la sensación de ser feliz, la alegría de recordar los días que pasaste en España, el bienestar que se siente al pensar que a muchos kilómetros hay mucha más gente que te quiere y que todos los días lee tu blog y que te hace reir por telefono o por internet y que cuando se acabe esta gran experiencia que estás viviendo te estarán esperando para seguir a tu lado. ¿Te parece poco? ¡Ay amiguito, eres muy afortunado! Reparte a tu alrededor, porque como somos Magos te
lo hemos dejado en envases mágicos: cuanto más des más tendrás.

Quisimos llevarnos algo de recuerdo y puestos a buscar nos pareció que lo mejor que nos podíamos llevar era esa cierta afición que tienes que hace que la cochambre huela a humo, pero no pudimos. Tienes que ser tu el que nos lo dé. Esperamos que el año que viene no te lo tengamos que pedir porque ¡no exista!
Recibe un abrazo de Melchor, Gaspar y Baltasar.